Yelapa Gathering superó mis espectativas. La primera sensación al llegar fue la sorpresa de no haber escuchado nada sobre la primera edición que se celebro antes de pandemia.
Texto y Fotografía: Leonel Mendoza
Quiero decir, desde la llegada al check-in de Yelapa Gathering la vibra fue prometedora. No para menos, les cuento.
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El primer escenario de Yelapa Gathering sobre la arena.
Sillones, sombra suficiente, barra de bebidas, buffet riquísmo. Todo lo que se pudiera desear frente al mar.
El segundo escenario de Yelapa Gathering se activaba por las noches.
Adentrado en la selva. El escenario y los árboles mapeados. El lugar Rodeado de un pequeño tianguis con puestos de comida y productos artesanales. Cojines y colchones para descansar.
Tengo que dedirlo: sucedió el sueño de la comuna hippie que todos soñamos alguna vez.
Han valido las 4 horas de carretera y otra hora más en lancha, para llegar a Yelapa desde Guadalajara.
Si esto no fuera suficiente en Yelapa Gathering,
(y claro que no lo es) música por toda la playa. El lines up ha estado cuidadosamente cuidado. Los géneros muy bien seleccionados para cada hora y escenario.
Si bien, la playa de Yelapa fue el personaje principal del festival. Lugar que más de una vez he llamado “isla” sin querer debido, a esa sensación de estar apartado de la tierra. Apartado de la civilización, un lugar inaccesible si no es por más crea este término en tu inconsciente que más de una vez me salía a flote; isla.
El otro personaje principal fue la música.
Mucho talento que me ha sorprendido, Sam Steele, Cristal Glass, María nocheydíam, Golden Ganga, Carlo Paloma del Cerro, Pug band y Golden Pinapple.
Me hubiera encantado escuchar todas las propuestas, amanecer junto al último beat en la playa a las 5am o 7am antes de dormir pero se necesita un cuerpo más necio que el mío ¿tú estarías dispuesto?
Sin más, una experiencia completa, la zona de camping bien adaptada, con luz, agua, espejos y un pequeño bar para desayunar.
Por la tarde subíamos al pueblo a nadar a la cascada y desayunar en algún restaurant local.
Gracias a Marlen Luna por la invitación, y Jimena Nacth por la gestión. Nos encantaría acompañarlos en su tercera edición. Cuenten con eso <3.